Hoy no jugaste a tu juego favorito,
tenías obligaciones importantes.
La inocencia mira y no comprende.
No le dijiste a tu esposa que la querías,
llegaste a casa pensando en dormir.
La inocencia calla, no comprende.
Mentiste pensando solo en vos,
esquivaste a esos niños en la calle.
La inocencia sufre y no lo entiende.
Mataste queriendo tener razón,
olvidaste que tenías sueños.
La inocencia está escondida,
tan encerrada dentro de tí.
Déjala salir, ella sabe lo que quieres...
Déjala ser y podrás reir como ayer.
Suscribirse a:
Comentarios de la entrada (Atom)
No hay comentarios.:
Publicar un comentario